La tecnología se ha transformado en la única forma moderna de producir artefactos útiles y valiosos para las exigencias de la sociedad, además de dominar e incorporar en sí mismo la mayoría de las actividades humanas.
Pensamos que las nuevas tecnologías, principalmente, condicionan a la sociedad en la medida que es uno entre los muchos factores que determina una sociedad, ya que le damos un cierto uso que nos condiciona como sociedad.
Tenemos un tecnología muy ponible, el que exista una tecnología no quiere decir que tengamos que usarla pero al fin y al cabo la usamos. La determinación de una tecnología sobre la sociedad, no es la tecnología en sí, sino la propia sociedad que crea la necesidad (a través de medios de comunicación,...) y a raíz de eso comienza la tecnología.
Es indiscutible que la tecnología en la actualidad, es la generadora de grandes cambios sociales y culturales a los cuales el individuo se ha adaptado en términos generales tanto en las relaciones laborales como familiares. Ya no es posible pensar en el desarrollo humano sin tomar en cuenta a los medios tecnológicos. Sin embargo, es importante matizar este planteamiento.
Pero también, no podemos dejar de reconocer que las propias tecnologías son artefactos que determinan a la sociedad. La propuesta del determinismo tecnológico manifiesta que los aspectos técnicos condicionan y modifican las relaciones sociales en el momento en que los usuarios los aceptan como mediadores en su entorno.
Por lo tanto, y desde mi punto de vista, la tecnología actúa como motor del cambio social, la tecnología determina la historia, causa transformaciones sociales, condiciona y moldea conductas, costumbres, creencias y la sociedad tiene que aceptarlas como un mandato dogmático que no puede estar en discusión.
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